A lo largo de la historia, se han utilizado materias de origen vegetal para teñir los tejidos. Los tintes se obtenían originalmente de fuentes que se encontraban en la naturaleza, como vegetales, plantas, árboles e insectos. La tradición de los tintes naturales se mantuvo hasta la década de 1850, cuando los tintes sintéticos empezaron a ser más populares debido al aumento de la demanda y la eficacia de los costes.
Hoy en día, los tintes naturales han regresado y los artesanos y diseñadores están redescubriendo el placer de teñir las fibras con tintes naturales debido a sus propiedades no tóxicas y respetuosas con el medio ambiente, proporcionando una opción de producción más sostenible.
En este post, te enseñaremos cómo transformar tus prendas tintándolas con rosas. La rosa ha sido objeto de veneración a lo largo de la historia y acogida por diversas culturas por su multitud de atributos medicinales, espirituales, emocionales y culinarios. En Catalunya, cada 23 de abril se celebra la Diada de Sant Jordi, una jornada donde las rosas, los libros y los enamorados son los protagonistas. El origen de este día reside en una leyenda de Sant Jordi y el dragón. El caballero venció al dragón que atemorizaba al pueblo y a la princesa, y al atravesarlo con su espada, del cuerpo del animal brotaron rosas rojas de las que Sant Jordi regaló a la princesa.
Si es la primera vez que te animas a tintar con materias naturales, esta es una gran manera de empezar. Sólo deberas saber que nada saldrá como esperas (¡sale mucho mejor!) y que es un proceso muy experimental y mágico. Los colores de los tintes naturales pueden variar de una prenda a otra, ya que son sensibles a muchas cosas: el pH del agua, la temperatura, las cantidades, el tiempo empleado… En el caso de las rosas, contra más brillantes e intensos sean sus colores, suelen dejar un color en las prendas más fuerte y saturado que las de colores más claros.
A continuación, indicamos los materiales que vas a necesitar:
- Una prenda de ropa (Orgánica como de algodón o seda)
- Rosas, flores o plantas
- Hilo
- Un palo o cuchara de madera
- Una olla de acero inoxidable
- Agua
- Vinagre
- Alumbre
Paso a paso
1. Primero de todo, deberás mojar la prenda en agua y estirarla en una superficie plana.
2. Siguiente, deberás colocar los pétalos como desees encima de la prenda. Puedes acomodarlos cuidadosamente en patrones y doblar la tela para obtener estampados simétricos. Dependiendo la concentración de pétalos, obtendrás más saturación o menos en la prenda.
3. Ahora deberás enrollar la prenda. Anuda con un hilo la prenda hasta que quede una especie de cuadrado que pueda caber en la olla y no se escapen los pétalos que hemos colocado.
4. Agrega agua a la olla y ponla a hervir.
5. Una vez el agua este hirviendo, añade vinagre y coloca con cuidado la prenda y ves removiendo de vez en cuando con la cuchara de madera para que se impregne bien toda ella.
6. Déjala el tiempo que desees. Dependiendo de la duración que este dentro del agua, obtendrás un resultado u otro.
7. Por último, deberás sacarla y dejarla reposar toda la noche, sin quitarle el nudo. Pasada la noche, podrás desenvolverla y retirar los pétalos con cuidado.
8. Déjala secar y plánchala antes de lavarla otra vez, para que así el tinte acabe de impregnar del todo.
Como hemos mencionado anteriormente, puedes realizar esta técnica con cualquier prenda de ropa que tengas por casa y quieras darle una segunda vida customizandola. Nosotras, hemos estado utilizando uno de nuestros pareos en color crudo que viene con el kit tie dye para teñir en casa. Se seca muy rápido y es un fresquito. Tiene dos cortes a los extremos y anudándolos se convierten en dos mangas para que lo puedas usar como vestido, ¡ideal para el verano!
Estamos deseando ver vuestros resultados finales. Recuerda etiquetarnos (@camilactg_) en Instagram para que podamos publicar vuestras creaciones en el perfil 🙂